Galletas personalizadas con logo

Cuándo, cómo y a quién regalarlas

Las galletas se han convertido en un recurso promocional cada vez más utilizado por empresas que desean destacar sin recurrir a los regalos de siempre. Sin embargo, para sacar el máximo partido a su potencial publicitario hay que saber cuándo regalarlas, cómo presentarlas y a qué público dirigirlas.

• ¿Cuándo?: Son un tipo de producto ideal para repartir en ferias, congresos o eventos corporativos. Asimismo, al tratarse de un detalle dulce, también encaja en campañas estacionales como Navidad, San Valentín o el Día de la Madre, por ejemplo. Incluso pueden incluirse en packs de bienvenida o en press kits de lanzamientos de producto o servicios.
• ¿Cómo?: El envoltorio y su presentación son clave, puesto que es la superficie donde se coloca el logotipo de tu empresa. Por ello, es imprescindible contar con un diseño cuidado, visualmente atractivo y que esté alineado con la identidad de marca.
• ¿A quién?: Son aptas para todo tipo de perfiles. Así pues, pueden entregarse a clientes fidelizados o potenciales, a empleados, a distribuidores o proveedores y al público en general que participe o visite tus campañas promocionales.

¿Envoltorio permanente o desechable?

Cuando decides regalar galletas como parte de tu estrategia promocional, el envoltorio de estas no es solo una cuestión práctica: es una parte fundamental de la experiencia de marca. Como tu logo estará en el packaging y no en la galleta, elegir el tipo de envoltorio - permanente o desechable - que mejor se adapte a tu empresa y audiencia es determinante para garantizar el éxito del regalo.

Te mostramos una comparativa entre ambas opciones:

Galletas cómo regalo corporativo eficaz

En un entorno empresarial cada vez más competitivo, ofrecer regalos corporativos que vayan más allá de lo funcional puede ayudarte a destacar frente a otras marcas.

En este sentido, regalar galletas lleva implícito un componente emocional. Y es que, si además, se presentan en un envoltorio personalizado, no solo se ofrece un dulce, sino una pequeña experiencia positiva que genera cercanía y crea un ambiente acogedor en diferentes entornos.

Asimismo, son una buena manera de reforzar la imagen y visibilidad de marca. Esto se debe a que se trata de productos con logo impreso que gracias a su diseño se pueden llevar fácilmente a cualquier tipo de evento u ocasión. Su formato individual las convierte en un detalle práctico, higiénico y fácil de repartir.

Pero su eficacia no se limita a lo visual. Las galletas personalizadas funcionan porque combinan lo sensorial con lo emocional. Agradan por su sabor, sorprenden por su presentación y, al incluir tu logo, son un activo promocional. Y lo mejor de todo: son económicas.

Por todo ello, incluirlas en tus campañas o como parte de tu merchandising corporativo es una forma sencilla, barata y efectiva de conectar con tu público.